Aunque ya estamos en Septiembre, todavía sigue haciendo mucho calor, en Madrid por lo menos, y qué mejor forma de refrescarnos que con un gazpachito casero bien fresquito. Hay muchas variantes de este plato, pero sin duda, el que más me gusta es este, que es el que hacía mi abuela y me enseñó mi madre, andaluzas de pura cepa :P.
Imprescindible: Una batidora, mejor de las de vaso, que es mucho más rápido y fácil, también se puede hacer con una minipimer de toda la vida, más abajo os lo explico.
Ingredientes para 1,5 Litros aprox.
- 5 tomates grandecitos ni muy verdes ni muy maduros, de los de ensalada. (se puede hacer con otros pero estos son los más baratitos).
- Medio pimiento verde. (6 dedos aprox.)
- Un trozo de pepino peladito. (4 dedos aprox.)
- 1 diente de ajo.
- 2 pizcas de sal.
- Un vasito de los de vino de aceite de oliva
- El mismo vasito de agua.
- Un chorro de vinagre (puede ser de Módena o de vino, personalmente, prefiero de Módena)
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| Los tomates son de la huerta de mi novio, por eso uno de ellos es gigante, están bueniiisiiimossssss |
Preparación.
1. Lavamos y cortamos todas las verduras en trozos, no hace falta que sean muy pequeños.
2. Los metemos en la batidora que debe estar desenchufada (por si las moscas).
3. Añadimos la sal, el aceite y el vinagre.
4. Le damos al botón a una velocidad media hasta que no tenga ningún grumito y esté bien cremoso.
5. Comprobamos que esté bien de sal, y si nos hemos quedado cortos echamos un poco más y batimos. ( Ya sabemos que más vale quedarse corto que pasarse)
6. Una vez hecho, lo metemos en un recipiente con tapa, o si no tenemos uno lo suficientemente grande, en un bol de los de ensalada y lo tapamos con papel transparente. Lo metemos en la nevera y lo dejamos hasta que esté bien fresquito.
Si lo que tenemos es una minipimer, hay que seguir los mismos pasos, pero se nos van a quedar grumos siempre, así que lo tenemos que pasar por el chino como hago a continuación *foto. Esto hace el proceso un poco más largo pero es igual de válido. Una vez pasado por el chino, volvemos a batirlo un poco para que nos quede todo bien ligadito y tratando de salpicar lo menos posible…
Nota nutricional.
Como he escrito antes, hay muchas recetas diferentes de gazpacho, y como muchos habréis podido pensar, esta no lleva pan. Bueno, el pan en el gazpacho sirve principalmente para espesar, y es uno de los aportadores de calorías, por tanto, si nos lo ahorramos, lo hacemos mucho más ligerito, estamos hablando de unas 45kcal por vaso.
Además nos aporta mucha vitamina C, antioxidantes, y fibra vegetal, entre otras cosas. Quién esté interesado en saber más puede echar un vistazo aquí.
Truquitos/Tips
- Si no os da tiempo a que se enfríe, siempre podéis añadirle 3 o 4 hielos.
- Podéis servirlo con un poco de jamón serrano y huevo duro, ambos picaditos, quedaréis como reyes.
- También podéis echarle medio vaso más de agua a la mezcla para que quede más liquidito para beberlo en lugar de tomarlo con cuchara.
- Quien prefiera echarle pan, se suele usar pan duro, que pondremos en remojo en agua para que se ablande, con un pedazo de unos 3 dedos va que chuta.
- Si a alguien “se le repite” el gazpacho, solo tiene que omitir el ajo (causante muy común de esta desagradable sensación) y echar un dedito más de pimiento verde para que no se quede muy flojo
- En una reunión con los amigos, podéis servirlo en vasos de chupito y ponerle un par de gotitas de aceite de oliva virgen, para darle un toque” nouvelle cuisine”
Y nada más por hoy, espero que os haya gustado mi receta, me encantaría que comentarais a ver qué os parece. Un saludo a tod@s.
